Sopa de Letras

Sábado 15 y Domingo 16 de Agosto fueron los días elegidos para uno de los eventos anime más grande de El Salvador. El evento fue trasladado de fecha por el temor de la gripe AH1N1 que invadía a nuestro pequeño pulgarcito, pero después de tanta espera pudimos arrojarnos enteramente a nuestro pequeño mundo.

Como costumbre ya de todos los años madrugue el día sábado para arreglarme y estrenar mi vestido de lolita y esperar a mi mejor amiga quien seria mi pareja al vestirse de kodona. Una vez listas (gracias a la ayuda de mi abuela) partimos a la universidad donde se llevaría a cabo el evento, y como siempre había una fila interminable de personas, tuvimos que esperar bajo el sol por horas, todos impacientes para que el evento por fin iniciara.

Al entrar cualquier Otaku o simple fan del anime entra en el paraíso, y eso fue algo que hice al pisar dentro y ver las docenas de tiendas con artículos de todo anime imaginable. Entre las actividades que se encuentran en la convención son: proyecciones, Karaoke, concursos, ventas, conciertos y muchas más. Claro sin olvidar los vistosos cosplays de todos los fans que se esfuerzan por confecciónar sus trajes al máximo.

Lastimosamente el día estuvo un poco vació, totalmente diferente a los otros años donde apenas y puedes respirar al entrar.

Sin mayor acontecimiento se llego el día domingo, el día ideal para fotografiar a los cosplayers y comprar todo a un precio menor. ¡El ejercicio de cuello es algo importante ese día! No sabes a donde dirigir tu mirada cuando vez a tantos personajes salidos directamente del manga para caminar por los largos pasillos.

Lelouch estaba ahí, junto con su hermana y sus amigos del colegio, Sasuke vistiendo su elegante y sexy traje del sonido, incluso se encontraban ahí uno pequeñitos vistiendo trajes de D-grey man.

Después de dar vueltas por ahí todo el día se llegó la hora de los tan esperados conciertos. El auditorio se llenó de gente hasta que parecía un enorme horno de tanto calor pero a nadie pareció importarle cuando las cortinas se abrieron y la música japonesa comenzó a todo volumen, el vocalista se encargó de deleitarnos con canciones de anime clásico a las cuales todos nos unimos gritando las letras que quizás y no entendemos a la perfección, pero cuando se trata de una pasión tan grande no hay barreras para nosotros.

A las 7 de la noche terminó nuestro cansado día, y todos nos retiramos a nuestras casas con una sonrisa que nos durara hasta la próxima convención

Hasta la próxima

Icha. Icha